Abordaje de las personas mayores con heridas crónicas
Las heridas crónicas son un problema de salud significativo, especialmente en las personas mayores, donde las lesiones crónicas pueden afectar a hasta un 9% de la población. Conocer los distintos tipos de lesiones crónicas y las medidas adecuadas para su tratamiento es esencial para su curación, mejorando la calidad de vida de los pacientes y reduciendo riesgos de complicaciones. Descubre los conocimientos básicos de la mano de la Dra. Elvira Hernández Martínez-Esparza, enfermera. PhD. Especialista en Enfermería geriátrica, Experta en llagas por la GNEAUPP y profesora en EUI-Sant Pau.
Definimos las heridas crónicas
Una herida crónica es aquella que no cura dentro de un conjunto ordenado de etapas y en un período de tiempo establecido, generalmente cuatro semanas (el tiempo normal para la resolución de una herida aguda).
Las heridas crónicas pueden clasificarse, principalmente, en:
- Lesiones relacionadas con la dependencia (LRD)
- Nafras de extremidad inferior (UEI)
- Otros (Dehiscencias quirúrgicas, llagas neoplásicas, etc)
Las que más afectan a las personas mayores son las Lesiones relacionadas con la dependencia (LRD) . Éstas, a su vez, se clasifican según el grupo científico GNEAUPP en cinco tipos:
- Lesiones por Presión - cizalla (LPP): daños a la piel ya los tejidos adyacentes por presión prolongada o cizalla, a menudo en prominencias óseas como talones o cóccix. Son comunes en personas con movilidad reducida.
- Lesiones cutáneas asociadas a la humedad (LESCAH): daños en la piel por exposición prolongada a la humedad, como incontinencia o sudoración excesiva, con inflamación o erosiones en las zonas afectadas. No suele afectar a tejidos subyacentes.
- Lesiones por roce o fricción: aparición de abrasiones o botellas en la piel, causadas por roce o fricción repetida. No suele afectar a tejidos subyacentes.
- Desgarros cutáneos (Skin tears): heridas por separación de la piel debido a un traumatismo o estiramiento, frecuentes en personas mayores con piel frágil. Tampoco suele afectar a tejidos subyacentes.
- Nafra terminal o de Kennedy: lesión cutánea en personas en situación de fin de vida, asociada al fracaso multiorgánico, habitualmente con forma irregular y cambios de color.
⭐ Conocer los diferentes tipos de heridas crónicas y saber diferenciar sus características y su origen es imprescindible para un correcto diagnóstico, que como veremos más adelante, es la clave para una prevención y abordaje adecuado.
Lesiones relacionadas con la dependencia: un problema sanitario infravalorado
Las LPP y las LRCD tienen una prevalencia bastante elevada.
Según un estudio del GNEAUPP de 2022, ésta es:
- En hospitales:
- 8,4% LCRD
- 7,7% LPP
- Atención Primaria y Domiciliaria:
- 5,8% LCRD
- 4,40% LPP
- Residencias y Atención Intermedia:
- 9,3% LCRD
- 5,4% LPP
Como vemos, la mayoría de las LCRD son lesiones por presión (alrededor del 90%).
Además, los estudios indican que buena parte de éstas son nosocomiales , es decir, que se presentan como consecuencia de un ingreso en el entorno hospitalario. Es cierto que personas mayores ingresadas en un hospital ya presentan un alto riesgo de lesiones por presión -no debemos culpabilizarnos-. Sin embargo, tomar conciencia del problema es esencial para prevenirlo movilizar los recursos necesarios .
Según la literatura científica:
- El 95% de las LPP pueden prevenirse con las medidas adecuadas.
- La presencia de LPP incrementa el riesgo de mortalidad de 2 a 4 veces en comparación con personas sin LPP, especialmente en pacientes de edad avanzada y cuidados intensivos.
- Se estima que 1€ invertido en prevención equivale a 50€ en tratamiento.
⭐ Por tanto, conocer e implementar medidas de prevención y tratamiento efectivas puede reducir significativamente las heridas crónicas, mejorando la calidad de vida de los pacientes y minimizando los riesgos asociados.
Abordaje de las heridas crónicas: medidas adecuadas
El abordaje adecuado de las heridas crónicas en pacientes geriátricos debe ser integral y multidisciplinar , y consta de cuatro puntos clave:
1. Valoración de la herida y del paciente
Un correcto diagnóstico es imprescindible para un abordaje efectivo. En muchas ocasiones, la tendencia es priorizar el tratamiento local de la herida, sin embargo, lo más importante es tener en cuenta que no existe una estrategia efectiva de las heridas crónicas si los profesionales sanitarios no filiamos correctamente su etiología y valoramos al paciente .
Esta valoración incluye:
- Escalas de valoración de riesgo
- Valoración nutricional
- Revisión de los fármacos
- Control del dolor
- Valoración de los pulsos si la herida está localizada en pie o extremidad inferior
- Valoración detallada de la herida
2. Control de factores etiológicos
Una vez identificado el origen de la herida, es necesario abordar los factores causantes. Para las LPP, las medidas incluyen:
- Plan de movilización del paciente: incrementar la movilidad para reducir la prolongada presión.
- Sistemas de alivio de la presión, tales como colchones alternantes de aire o almohadas especiales que redistribuyen los puntos de presión. Esta es la estrategia más efectiva para el cuidado de las LPP .
- Minimizar la sedestación: especialmente en pacientes con LPP en la zona del coxis, equilibrando los riesgos y beneficios de la posición en cama. Cambios posturales y técnicas de posición: reducir la presión en áreas vulnerables.
- Protección local: uso de apósitos específicos para proteger a las zonas afectadas.
⭐ Importante : hay que ser conscientes de que éste es uno de los momentos en los que más falla la asistencia sanitaria en el abordaje de las heridas crónicas relacionadas con la dependencia, a menudo por falta de recursos. Es esencial tener en cuenta que:
- Sin superficies especiales por el manejo de la presión, como los colchones alternantes de aire, no se pueden curar las LPP . Éstos son la opción más adecuada para pacientes con alto riesgo de LPP y para pacientes con LPP categoría III-IV (con pérdida del grosor de la piel y afectación de estructuras de sostiene, según la recomendación GNEAUPP).
- En las llagas de extremidad inferior venosas (UEI), es necesaria la compresión terapéutica para curar las heridas. Es necesario gestionar el edema, determinando correctamente el origen de la herida.
3. Control de factores coadyuvantes
Incluye la adecuada nutrición y el control de patologías que puedan influir en la curación de las heridas, como la diabetes o enfermedades vasculares.
4. Cuidado local
- Limpieza y desbridamiento: eliminación del tejido necrótico.
- Control de la carga bacteriana con antimicrobianos tópicos, como los productos con plata. Detectando signos de infección y biofilm .
- Gestión del exudado: mantener la higiene y el medio ambiente adecuado para la curación.
- Estimulación de la epitelización: promover el crecimiento de nuevas células de la piel con productos específicos.
⭐ Importante:
- Los signos de infección en la heridas crónicas son diferentes a los de las heridas agudas: es necesario saber distinguirlos para poder iniciar tratamiento con antimicrobianos tópicos específicos, como los productos con plata. Puede encontrar los signos en esta tabla:
- El biofilm en las heridas crónicas es difícil de eliminar y precisa de constante desbridamiento.
El biofilm es una fina capa, formada por microorganismos (principalmente bacterias), que se adhieren a la superficie de la herida rodeados de una matriz protectora. Este biofilm actúa como una barrera física y química que protege a las bacterias de la acción de los antimicrobianos , haciendo que las infecciones sean más persistentes y difíciles de tratar. Por eso, su control y eliminación mecánica es esencial para poder gestionar las heridas crónicas correctamente.
Conclusiones
En resumen, un correcto abordaje de las heridas crónicas en personas mayores requiere un conocimiento del tipo de lesión y la aplicación de las medidas adecuadas para su curación. Con una correcta valoración y los recursos necesarios, es posible mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes, reduciendo al mismo tiempo los riesgos de complicaciones graves. La inversión en prevención y tratamiento es clave para optimizar los resultados asistenciales.
¿Quieres ampliar conocimientos?
Aquí te dejamos unas recomendaciones bibliográficas imprescindibles:
- Documento técnicos GNEAUPP y documento “Breve y fácil en heridas” de la GNEAUPP, disponibles en la Biblioteca Alhambra en: [Link]
- Lesiones relacionadas con la dependencia: prevención, clasificación y categorización. Documento clínico 2020 [Link]
- Cómo valorar una herida. GNEAUPP: [Link]
Elvira Hernández Martínez-Esparza
Enfermera. PhD. Especialista en Enfermería geriátrica
Experta en llagas por la GNEAUPP
Profesora EUI-Sant Pau
Coordinadora del Máster de infería gerontológica y geriátrica y del curso: Cuidados avanzados de enfermería en la prevención y tratamiento de las heridas crónicas EUI-Sant Pau- UAB
93 380 09 70